Lo conocí en la escuela. Nos prestamos la infancia,
el banco, los recreos, el sol del mediodía,
los vuelos de regreso a su casa, a la mía
y compartimos tardes de olímpica vagancia.
Jugar durante horas, aun cuando llovía,
pelearnos con un gesto de estudiada arrogancia,
lanzarnos mil abrojos, con cruel beligerancia
y pedazos de tierra hasta que anochecía.
Tirarnos en el pasto y sentir la fragancia
de la menta aplastada… Y ahora, a la distancia,
me pregunto por qué no guardé, de algún día,
un puñado de abrojos de los tantos que había,
o un trébol, o un cascote con marcas de alegría.
Era mi amigo. El resto… no tenía importancia.
PRECIOSO!! Me emocionó!!
ResponderEliminarUn beso grande!!
Pero QUÉ BONITO!!!! Me encantó. Un abrazo y feliz fin de semana.
ResponderEliminarHola Vivi, me encantó y me emocionó. Siento no haber pasado antes, el tiempo y otras cosas más no me lo permitieron. Ahora con las vacaciones voy a intentar ponerme al día, echo de menos visitaros, saber de vosotros.
ResponderEliminarGracias por pasarte por mi blog, por tus palabras.
Me gusta mucho la imagen de tu blog.
Te traigo un regalito que espero te agrade, puedes pasar a recogerlo por:
http://lostesorosdemisblogs.blogspot.com/2011/07/regalo-stylish-blogger-award.html
Un abrazo muy grande y hasta pronto.
Gracias Encarni !!a mi me pasa lo mismo ,a veces no tengo mucho tiempo para dejar comentarios en todos los blogs amigos ...
ResponderEliminarPaso a buscar el regalo y disfrutá de tus vacaciones ...
besitos